Ser, Hacer y Tener: ¡El proyecto de vida que estabas buscando!
¿Qué
haces para lograr tus sueños? Tendemos a centrarnos en el hacer diario para
alcanzarlos y creemos que para tener lo que tanto anhelamos hay que trabajar
duro, luchar y atravesar un momento de angustia para finalmente, ser exitosos.
Sin
embargo, cuando no lo logramos, nos estancamos. Llegamos a pensar que no se puede avanzar más
o nos quedamos infelices en el mismo lugar. Tratamos de seguir los pasos de
otras personas exitosas para lograr lo que ellos tienen, pero en ningún momento
nos detenemos a ver en nosotros mismos.
¿Qué es
Ser, Hacer y Tener? Empecemos
reflexionando sobre el orden en el que regimos nuestra vida. ¿Quién
no quiso alguna vez hacerse millonario, viajar por todo el mundo o comprarse el
último Smartphone de su marca favorita? Basta con recordar esos deseos que
alguna vez tuvimos, para darnos cuenta que muchos creímos que “tener” nos hará
felices.
Desde el Coaching Ontológico (reflexión sobre la existencia), Hacer
para Tener y luego Ser, es una fórmula descartada. No por los componentes que
tiene, sino por el orden en el los llevamos a cabo, que nos lleva a un círculo
vicioso donde admiramos las acciones y restamos valor a la esencia de donde
parten aquellos que obtuvieron lo que querían partiendo de escuchar lo
que amaban.
En la
disciplina que impartimos, es el Ser el protagonista que nos llevará a escuchar
nuestro interior, el “quiénes somos”
para reconocer en qué mundo nos desenvolveremos. ¿Escuchaste hablar de
la frase “Trabajar en lo que se ama”?
Aprende a aplicarlo: Para hacer de nuestro Ser el protagonista de nuestros proyectos, es necesario seguir una serie de pasos que te harán alcanzar eso por lo que luchaste y tenías presente de forma consciente o inconsciente.
1. Mira hacia tu interior: ¿Quién eres? Es fácil partir por nuestro
nombre, edad y lo que actualmente hacemos, pero hay que mirar un poco más allá
para lograrlo. Para
conocerte un poco más, te proponemos preguntarte si eres lo que
haces y de no ser así, qué te falta para hacerlo. Pregúntate si lo que
quieres en unos meses te permitirá recrear esa realidad que anhelas y si
lo que haces actualmente, te produce esa calidez en tu corazón que transmite
alegría y satisfacción. Observa tus emociones, lo que te produce
nostalgia, lo que te enoja o lo último que te causó euforia.
2. Enfócate en tu Realidad Ideal: Todos tenemos un sueño que para
nosotros, significa “Ser feliz”. No hablamos de obtener cosas
materiales como un auto de último modelo o un departamento bonito en
la mejor zona de la ciudad. Hablamos de ese mundo ideal en donde queremos
vivir, como por ejemplo: Ser reconocido por mis colegas y poder liderar un equipo.
Haz de tus sueños tu motivación del día a día y parte de ahí para despertarte a diario y luchar por ellos. Si por ejemplo, sientes que ser Orador era tu sueño desde niño y percibes satisfacción en ti cuando hablas en público, empieza a practicar diariamente leyendo en voz alta, amplía tu vocabulario, trata de conocer sobre otros oradores. Pide consejos que te hagan sentir que estás creciendo y avanzando hacia eso que te hace feliz.
3. Haz del compromiso tu día a día: Existe una gran diferencia entre
la exigencia que ejercemos sobre nosotros para alcanzar algo, y el compromiso
que tenemos con una meta. La primera, nos deja en la posición de hacer a toda
costa algo, haciendo que nuestro propósito momentáneamente pierda la gracia de
ser. Enfocarnos en nuestros sueños y hacer de cada acción una forma de
manifestar lo que queremos lograr un día, no debería ser una tarea, sino algo que
poco a poco te genere bienestar y te recuerde que estás siendo quien quieres
ser; de esto trata el Compromiso.
4. Mira cómo se alinea todo: Todo es cuestión de tiempo. Empezar con pequeñas acciones que
estén enfocadas a tu realidad ideal, hará que poco a poco vayas notando el
sentido que adquieren tus días, cómo apreciarás cada nuevo paso que das y cómo
tu autenticidad empezará a surgir. El tiempo preciso en el que esto se
manifieste dependerá del enfoque que le brindes diariamente a repasar tu
realidad ideal. Quizás en un inicio descubras que tenías otros compromisos
ocultos muy alejados de lo que quieres alcanzar más adelante, y es ahí donde
deberás realizar algunos ajustes para ver resultados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario